La fábula original de Esopo, y las posteriores versiones que en tiempos barrocos e ilustrados hicieron La Fontaine y Samaniego, convirtieron a la cigarra en el símbolo por antonomasia de la pereza frente a la laboriosidad de la hormiga. En esta producción ideada por la SMADE, es la cigarra la que toma la palabra para explicarse, arropada por el virtuosismo de Dani Zapico a la tiorba. La creación del texto corresponde al escritor Miguel Barrero.